SANTIAGO.- Los deslizamientos de tierra producto de los fuertes aguaceros registrados en las últimas horas cobraron la vida de dos personas en Altamira, Puerto Plata.
Las víctimas fueron identificadas como Cástula Cabrera, de 40 años de edad, y su hija Hilda Cabrera, de 11 años, quienes fallecieron aplastadas por un árbol que cayó sobre su vivienda.
La información fue cofirmada a Clave Digital por Hugo González, miembro de la Defensa Civil en Puerto Plata.
El gobernador de Santiago, José Izquierdo, afirmó que en las próximas horas estarían declarando en emergencia el municipio de Tamboril, afectado por la crecida del río Licey, que cubrió todo el pueblo obligando a la evacuación de decenas de familias.
Izquierdo reveló que desde la tarde de este domingo iniciaron los planes de apoyo para socorrer a las familias afectadas por la riada con la entrega de cobijas, alimentos y los operativos médicos que sean necesarios para evitar brote de enfermedades.
Afirmó, asimismo, que por lo pronto lo más importante es reforzar los organismos de socorro para que no hayan pérdidas de vidas durante el tiempo de lluvias que se espera seguirán hasta este martes, según los pronósticos de la Oficina Nacional de Meteorología.
"No tenemos muertos en Tamboril, ya nosotros hemos estado al tanto y damos seguimiento a la situación. En el día de mañana vamos a empezar a entregar alimentos, algunas frazadas y colchones, a las personas más afectadas", indicó.
Hasta el momento las autoridades de socorro en Santiago no han ofrecido los números de la cantidad de familias afectadas, debido a que el pueblo de Tamboril está en condiciones intransitables.
En relación con la presa de Tavera, el gobernador reveló que el desagüe subió de 380 metros cúbicos por segundos a 500 en la tarde de este domingo.
El director de la Defensa Civil, Luis Luna Paulino, aseguró que la situación de la presa de Tavera está controlada, ya que, según dijo, la cantidad de agua que está entrando al embalse no es muy distante de la cantidad que se está