San Cristobal; Ocho fugados en los últimos días de la cárcel de Najayo, San Cristóbal, considerados de alta peligrosidad, entre ellos el acusado del asesinato de un hijo de un diputado, continúan en las calles sin que las autoridades sepan sus paraderos.
Se trata de los reclusos que se escaparon el 10 de julio, el domingo 8 del mes que discurre y otro este jueves quien está condenado a 20 años de cárcel por narcotráfico.
Con relación al recluso Jimmy Oliver Rodríguez de la Cruz, condenado a 20 años por droga, se escapó este jueves cuando era retornado de madrugada a la cárcel luego de recibir atenciones médicas en un centro de salud.
Las autoridades de la Dirección General de Prisiones dijeron esta mañana que aún no saben nada de su paradero.
Un informe entregado al coronel Leoncio Ferreira Díaz, comandante de la Policía en esa provincia, precisa que Rodríguez de la Cruz fue trasladado desde el penal en una yipeta Mitsubishi conducida por la señora María Teresa Germosén Peña, a quien se señala como concubina del reo.
De acuerdo al citado informe, Rodríguez de la Cruz fue trasladado en la yipeta Mitsubishi, placa A486252 que conducía la señora María Teresa Germosén Peña.
El informe señala que el vehículo en que era trasladado fue interceptado a las 4:45 de la tarde en la autopista Seis de Noviembre por seis hombres vestidos de negro, portando armas largas, y protegidos con chalecos antibalas.
Los hombres viajaban en una yipeta Toyota Lexus, con una placa terminal 36 y en otra yipeta Honda Acura, cuyos datos se ignoran, con las cuales interceptaron el vehículo en que iba el recluso.
Luego de desarmar al sargento Romero Pérez, se marcharon y dejaron el vehículo en que viajaba Rodríguez de la Cruz.
La jefatura de la Policía designó hoy a un alto oficial para que investiguen el caso.
El mayor general José Armando Polanco Gómez, jefe de la institución, instruyó al coronel Neivis Pérez Sánchez, subdirector de Inteligencia Delictiva, a que se adhiera a las indagatorias que realiza en ese sentido el director de Seguridad de Prisiones, general retirado Tomás Holguín de la Paz.
El oficial Pérez Sánchez y la dirección de Prisiones establecerán si el caso se trata de una fuga planificada, un rapto o un secuestro por parte del grupo que con armas largas tomó al recluso por la fuerza.
El hecho se registró en la madrugada de ayer cuando el sargento Romero Pérez trasladaba al recluso a la cárcel modelo de Najayo Hombres, luego de salir del hospital Central de las Fuerzas Armadas, donde fue a chequearse la salud.
El general Nelson Rosario, vocero de la Policía, confirmó que el recluso Rodríguez de la Cruz, fue condenado a 20 años de prisión por violar la Ley 50-88, sobre drogas.
En tanto, el alcaide del penal, Leoncio Madé, definió el hecho como una fuga.
Según trascendió, el recluso fue trasladado al referido centro médico en un vehículo de su propiedad.
Otros
Tampoco se sabe nada de cinco de ocho presos considerados de alta peligrosidad que se fugaron la madrugada del sábado 10 de julio de la celda de castigo de la cárcel Najayo-Hombres. De los ocho, fueron reapresados dos.
La fuga se produjo a las 2:00 de la madrugada, luego de que el grupo rompiera con una segueta los barrotes de la celda.
Los fugados en esa ocasión fueron William Cadena Castillo, Manolo Bautista Taveras, Moisés Ozorio Rodríguez, Eleazar de León Soto, Johnatan Valenzuela Rosario, el haitiano Carlos Julio Valdez Taveras, Eliazar Cristian de los Santos y Guillermo Eugenio Reyes.
De ese grupo las autoridades reapresaron en Yaguate, San Cristóbal, a Recio y Cárdena Castillo, mientras que Valenzuela Rosario fue entregado por sus familiares a las autoridades de esa cárcel.
Mientras, el domingo ocho de este mes se fugaron otros dos reclusos de la citada cárcel, incluyendo uno acusado de la muerte del hijo de un diputado.
Roberto Hernández, asistente del director general de Prisiones, mayor general retirado Manuel de Jesús Pérez Sánchez, confirmó que de estos dos fugados, uno está acusado de la muerte del joven Wellington Rafael Molina, hijo del diputado reformista Rafael Molina Lluberes.
Hernández dijo entonces que la Policía tenía buenas pistas sobre el paradero de estos dos prófugos, por lo que en las próximas horas podrían ser capturados y retornados a prisión.
Por esta fuga la Dirección General de Prisiones dispuso el arresto de la dotación de la Policía en la cárcel, compuesta por siete centinelas y tres supervisores.
Los fugados, en este caso, fueron identificados como Kelfren Arturo Placencia, acusado de la muerte del joven Molina; y Marcos Antonio Gómez (Colita).