“Yo no quiero ver a mami muerta, tráiganmela viva”, fueron las palabras de la niña Gabriela López Reyes cuando su abuela, bisabuela y tíos le dijeron que su madre había sido asesinada por su padre.
La niña, de siete años, también se negó a entrar a la funeraria “La Milagrosa”, donde fue velada su madre, Fary Unice Reyes Mateo, de 28 años, asesinada por su esposo, el alférez de fragata Ramón López Contreras, el pasado sábado a las 7:00 de la mañana, quien minutos después se suicidó de un tiro a la cabeza, en el puente flotante sobre el río Ozama.
Alida Argentina Mateo, Alida y Nancy Ester Reyes Mateo, abuela, madre y hermana de la joven asesinada, en declaraciones en su vivienda, narraron que tras informarle a la niña comenzó a llorar.
La madre de Gabriela fue ultimada de varios disparos por López Contreras, en una aparente ira de celos, porque rehusaba reconciliarse, tras más de un año separados, porque la maltrataba físicamente.
Reyes Mateo trató de huir pero el marino no cesó de dispararle, alcanzándola en la cabeza, el brazo derecho y el abdomen. La joven cayó frente a su casa.
La Jefatura de la Marina aseguró que se encargará de la manutención de la niña hasta que cumpla los 18 años de edad, mientras que el doctor César Mella, está en disposición de dar terapia psicológica gratis para evitarle traumas.
Los familiares de Fary Eunice dijeron que ella trabajaba para darle todo a su hija, que va a un colegio privado, donde ingresaba a las 8:00 de la mañana y la recogía a las 5:00 de la tarde, cuando retornaba de su trabajo de cajera en la empresa Eddy García.
López Contreras se disparó a la cabeza cayendo al río Ozama, y su cuerpo rescatado por dos miembros de la Policía que patrullaban y otros dos de la Marina.
Reyes Mateo había terminado los estudios en la universidad y elaboraba el monográfico para obtener el título de Licenciada en Contabilidad.
Luego de asesinar a su esposa, el oficial de la Marina se presentó a la vivienda donde ella vía con su madre, situada en la calle Cuarta número 14, del sector Los Mameyes, y continúo disparando y tres proyectiles impactaron en las persianas frontales y en la nevera.
“A la niña le dijimos todo lo que ocurrió de que su padre había matado a su mami, y ella dijo que no quería ver a su mamá muerta, que se la trajeran viva”, dijo Alida Argentina.
Agregó que la noche anterior de haber sido asesinada su nieta, López Mateo le había lesionado un brazo, “pero Fary dijo se había caído cuando López la haló para que hablaran a fuera de casa, cosa que no creímos mucho”.
Los parientes dijeron que parece que el oficial de la Marina planificaba el crimen hace mucho.
Alida, madre de la joven asesinada, dijo que su hija no tenía enamorado “por temor a que Ramón lo matara”.
lunes, diciembre 21, 2009
Niña se resiste a ver madre muerta