Rusia mantiene la firmeza y la confianza en sus acciones en Georgia e incide en su discurso sobre la posición equivocada de occidente en el país caucásico. El ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, ha advertido a Estados Unidos y a sus aliados de que que si apuestan por el régimen del presidente georgiano, Mijaíl Saakashvili, incurrirán en un error de "magnitud histórica", ya que se alejan del interés real por solucionar el problema del pueblo georgiano, ya que el líder del país caucásico " nada ha aprendido".
El jefe de la diplomacia rusa ha hecho esta advertencia en una clase magistral dictada el Instituto Estatal de Relaciones Internacionales de Moscú con motivo del inicio del año lectivo, en la que ha sostenido que "el fantasma del gran juego nuevamente se pasea por el Cáucaso" y ha indicado que la reacción de algunos países occidentales a la crisis deja en evidencia su "déficit de moral", pues se basa en argumentos de orden geopolítico e ideológico "sin relación con la realidad".
Lavrov ha subrayado que "Rusia ha vuelto a la arena internacional como un Estado responsable, capaz de defender a sus ciudadanos", y ha destacado que la "operación de imposición de la paz a Georgia " y el reconocimiento de las independencias de Osetia del Sur y Abjasia despejan toda duda que pudiera haber al respecto. El ministro de Exteriores sugirió la imposición de un embargo internacional a las ventas de armas a Georgia por su agresión a Osetia del Sur.
Relaciones con Alemania y EEUU
Lavrov tiene muy claro que su país no permitirá a nadie meter una cuña en las relaciones con Berlín, tras destacar que la "reconciliación ruso-alemana (después de la Segunda Guerra Mundial) es uno de los factores más importantes de la edificación de la nueva Europa".
También ha querido mostrar su disponibilidad a desarrollar sus relaciones con cualquier administración que se instale en la Casa Blanca, siempre que EEUU entienda "que las relaciones entre las principales potencias mundiales pueden edificarse sólo sobre la base de una rigurosa reciprocidad y honestidad total". Ha recalcado que "vamos a hablar con Washington mientras exista la más mínima esperanza de entendimiento y de llegar a acuerdos".
Zapatero aboga por el diálogo
Moscú considera que la cumbre que está celebrando la Unión Europea sobre las consecuencias de la guerra en Georgia va a aclarar muchas cosas sobre las intenciones de muchos de los principales países protagonistas del concierto internacional. La postura del Gobierno español en esa reunión es clara: una defensa de la necesidad de mantener "abiertas las vías del diálogo" con Rusia.
Como ya indicó el pasado viernes la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, España ha mantenido en todo momento su postura prudente, que es la "que mantiene la UE". "Por un lado firmeza a la oposición a la presencia de soldados rusos en Georgia y rechazo al reconocimiento de la independencia de Osetia del Sur y Abjasia por parte de Rusia".
El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Angel Moratinos, ha insistido en esta idea y mantiene que España defiende en Georgia los grandes criterios de Naciones Unidas, incluido el principio de integridad territorial, tal como ya defendió "en el caso de Kosovo".
El Ejecutivo español es partidario de que la UE mande "un mensaje claro y unificado" a Moscú, pero "manteniendo el diálogo". Asimismo, considera necesario que " Georgia, Osetia del Sur y Abjasia establezcan un diálogo directo para buscar una salida a la situación actual". Además, está dispuesto a "colaborar" en las iniciativas europeas para facilitar ayuda humanitaria y económica y en una "posible misión civil de observación".
Sarkozy quiere repetir visitas
El presidente francés y de turno de la Unión Europea, Nicolas Sarkozy, quiere viajar de nuevo a Rusia y a Georgia para "hacer avanzar la causa de la paz", según el primer ministro galo, François Fillon.
Horas antes de la cumbre extraordinaria de la UE, Fillon ha reafirmado la oposición de París a sanciones contra Moscú, que ha reconocido la independencia de las regiones georgianas de Abjasia y Osetia del Sur. La palabra "diálogo", y no las sanciones, está "en el orden del día", ha recalcado el jefe del Gobierno francés en una entrevista con la emisora Europe 1.
"Hay dos opciones posibles: dialogar, o bien recrear a cualquier precio la guerra fría, se señala a Rusia con el dedo, se la aisla y se la sigue pisoteando, como ha sido el caso desde hace años. No es el camino que han escogido Francia y Europa", ha afirmado el primer ministro galo.
El jefe de la diplomacia rusa ha hecho esta advertencia en una clase magistral dictada el Instituto Estatal de Relaciones Internacionales de Moscú con motivo del inicio del año lectivo, en la que ha sostenido que "el fantasma del gran juego nuevamente se pasea por el Cáucaso" y ha indicado que la reacción de algunos países occidentales a la crisis deja en evidencia su "déficit de moral", pues se basa en argumentos de orden geopolítico e ideológico "sin relación con la realidad".
Lavrov ha subrayado que "Rusia ha vuelto a la arena internacional como un Estado responsable, capaz de defender a sus ciudadanos", y ha destacado que la "operación de imposición de la paz a Georgia " y el reconocimiento de las independencias de Osetia del Sur y Abjasia despejan toda duda que pudiera haber al respecto. El ministro de Exteriores sugirió la imposición de un embargo internacional a las ventas de armas a Georgia por su agresión a Osetia del Sur.
Relaciones con Alemania y EEUU
Lavrov tiene muy claro que su país no permitirá a nadie meter una cuña en las relaciones con Berlín, tras destacar que la "reconciliación ruso-alemana (después de la Segunda Guerra Mundial) es uno de los factores más importantes de la edificación de la nueva Europa".
También ha querido mostrar su disponibilidad a desarrollar sus relaciones con cualquier administración que se instale en la Casa Blanca, siempre que EEUU entienda "que las relaciones entre las principales potencias mundiales pueden edificarse sólo sobre la base de una rigurosa reciprocidad y honestidad total". Ha recalcado que "vamos a hablar con Washington mientras exista la más mínima esperanza de entendimiento y de llegar a acuerdos".
Zapatero aboga por el diálogo
Moscú considera que la cumbre que está celebrando la Unión Europea sobre las consecuencias de la guerra en Georgia va a aclarar muchas cosas sobre las intenciones de muchos de los principales países protagonistas del concierto internacional. La postura del Gobierno español en esa reunión es clara: una defensa de la necesidad de mantener "abiertas las vías del diálogo" con Rusia.
Como ya indicó el pasado viernes la vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, España ha mantenido en todo momento su postura prudente, que es la "que mantiene la UE". "Por un lado firmeza a la oposición a la presencia de soldados rusos en Georgia y rechazo al reconocimiento de la independencia de Osetia del Sur y Abjasia por parte de Rusia".
El ministro de Asuntos Exteriores y Cooperación, Miguel Angel Moratinos, ha insistido en esta idea y mantiene que España defiende en Georgia los grandes criterios de Naciones Unidas, incluido el principio de integridad territorial, tal como ya defendió "en el caso de Kosovo".
El Ejecutivo español es partidario de que la UE mande "un mensaje claro y unificado" a Moscú, pero "manteniendo el diálogo". Asimismo, considera necesario que " Georgia, Osetia del Sur y Abjasia establezcan un diálogo directo para buscar una salida a la situación actual". Además, está dispuesto a "colaborar" en las iniciativas europeas para facilitar ayuda humanitaria y económica y en una "posible misión civil de observación".
Sarkozy quiere repetir visitas
El presidente francés y de turno de la Unión Europea, Nicolas Sarkozy, quiere viajar de nuevo a Rusia y a Georgia para "hacer avanzar la causa de la paz", según el primer ministro galo, François Fillon.
Horas antes de la cumbre extraordinaria de la UE, Fillon ha reafirmado la oposición de París a sanciones contra Moscú, que ha reconocido la independencia de las regiones georgianas de Abjasia y Osetia del Sur. La palabra "diálogo", y no las sanciones, está "en el orden del día", ha recalcado el jefe del Gobierno francés en una entrevista con la emisora Europe 1.
"Hay dos opciones posibles: dialogar, o bien recrear a cualquier precio la guerra fría, se señala a Rusia con el dedo, se la aisla y se la sigue pisoteando, como ha sido el caso desde hace años. No es el camino que han escogido Francia y Europa", ha afirmado el primer ministro galo.