miércoles, junio 11, 2008

Para no digan que solo es aqui, en New York no duermen del calos por los apagones

Jackeline Rivera, quien reside en uno de los vecindarios de El Bronx afectados por los apagones del lunes, amaneció ayer echándole fresco con un trozo de cartón a su bebé asmático de 1 año, pues la electricidad no había regresado.
Al igual que Rivera, 395 clientes seguían sin electricidad ayer por la mañana en el sector High Bridge de El Bronx, según Con Edison.

Desde el lunes en la noche Con Edison tenía más de ocho vehículos en la zona realizando reparaciones.

“Tengo cinco hijos. La luz se fue como a las 10:45 de la noche y temía que a mis dos hijos pequeños les fuera a dar un ataque de asma. Abrimos las ventanas, pero el apartamento parecía un horno”, recalcó Rivera, quien explicó que su hija de 14 años, Reynni Jiménez, no había podido asistir a la escuela porque se desveló sentada en una silla toda la noche del lunes tratando de refrescarse.

“Todo se me dañó en la nevera, la leche, la fórmula del bebé, las carnes, los vegetales. Ahora me llevo a toda la familia a sentarnos a un McDonald’s a refrescarnos”, agregó la madre.

Durante la tarde de ayer los residentes de la avenida Shakespeare en High Bridge, desde la calle 167 hasta la 170, sacaron sillas y se sentaron a la sombra, tomando agua, jugos y emparedados, a la espera de la electricidad, que según Con Edison iba a regresar cerca de las 3 p.m.

Pronósticos indicaban que las temperaturas iban a alcanzar los 97 grados Fahrenheit ayer, rompiendo el récord de 95 de 1984. Con el factor humedad, se iba a sentir entre los 103 y 106 grados.

Elizabeth Mercedes, dueña del salón de belleza El Rincón, en High Bridge, se quejó de las pérdidas que iba a sufrir debido al apagón y señaló a las mujeres que estaban esperando en fila por el regreso del fluido eléctrico para arreglarse el pelo.

“Aquí hacemos maquillajes, permanentes, tintes, lavado de pelo y secado, y nada hemos podido hacer por culpa del apagón. No es justo. Le pagamos puntualmente la cuenta a Con Edison y todos los veranos ocurre lo mismo”, se quejó Mercedes.