Guzmán Cabral, de 76 años y residente en Santiago, tuvo que librar varias batallas legales durante más de 30 años para que le reconocieran como heredero de la fortuna de los Guttmann.
"Han sido 30 años de recolección de documentos para una serie de batallas legales con los bancos suizos”, dijo Guzmán Cabral.
Conforme a su relato, todo empezó con algunas investigaciones a raíz de la famosa herencia de la familia Guzmán, pero que sus reclamos no tienen nada que ver con ese caso.
Reveló que las investigaciones encaminadas en ese entonces, permitieron detectar una gran fortuna en bancos suizos a nombre del ciudadano de ese país Josef Guttmann y su esposa de origen dominicano, Therese Guttmann.
Abundando sobre su historia, refiere que Josef Guttmann era un fino artesano propietario de una de las más famosas joyerías de Suiza, quien al igual que otros ciudadanos cayó en los campos de concentración de los Nazis y terminó asesinado durante el holocausto.
"Al morir su esposo, la traumática experiencia vivida durante los largos años del holocausto y sin haber procreado hijos en el matrimonio, la dominicana deambuló sola por Europa y finalmente llegó a su país en busca de sus parientes donde falleció años más tarde", narra.
Dijo que al establecer que Therese Guttmann, cuyo nombre verdadero era Teresa Cabral, hermana de su padre, inició la recopilación de documentos legales que le permitieran establecer el árbol genealógico de la familia.
Relató que tuvo muchos afanes en las oficialías civiles, la Junta Central Electoral, Iglesias, Cancillería y la embajada de Suiza en el país.