martes, noviembre 04, 2008

Estados Unidos empieza a votar; hay al menos 153 millones de electores

WASHIGNTON.- En medio de una expectación mundial, Estados Unidos ha comenzado su cuenta atrás para elegir a su próximo presidente. El pistoletazo de salida de este cuatro de noviembre se ha dado en la localidad de Bennington, en el Estado de Vermont, donde ya han abierto los colegios electorales.

Sin embargo, aunque de manera simbólica el lugar que ha registrado los primeros votos ha sido el pequeño pueblo de Dixville Notch, en New Hampshire, que ha dado esta pasada madrugada la primera victoria a Obama. También el Estado de Nueva York ya permite a sus ciudadanos depositar su voto para Obama o McCain.El censo electoral se calcula en unos 153 millones de votantes, casi el 75% de las aproximadamente 200 millones con derecho al voto, y se espera que el nivel de participación alcance los dos tercios, una cifra récord. Los votantes elegirán no sólo al presidente del país, sino también a un tercio de los 100 miembros del Senado y los 435 representantes de la Cámara Baja, además de las asambleas de muchos Estados, ediles, jueces, jefes de policía y otros cargos locales, incluso una serie de propuestas, según la región, de lo más variopinta.

Tras una de las campañas más largas y apasionantes, los dos aspirantes al sillón de la Casa Blanca han gastado toda su munición en esta recta final, mostrándose cautos ante una jornada crucial, que pone al país, la primera potencia mundial, en la diatriba de elegir entre el pasado y el futuro, que de cualquier manera dibujará un escenario diferente al poner fin a ocho años de Administración Bush. Tanto Obama, favorito en todos los sondeos, como McCain, que ha echado el resto en el último día de campaña con un frenético recorrido por siete Estados, han pedido a sus electores que acudan a votar ante la magnitud de este 4 de noviembre.

"Nuestro futuro depende de las próximas 24 horas"

El candidato demócrata, Barack Obama, ha advertido a sus seguidores que eviten el exceso de confianza a pocas horas de que finalice la campaña. "No creáis ni por un segundo que estas elecciones se han acabado. No creáis por un momento que se alcanzará el poder sin luchar. Tenemos que trabajar como si nuestro futuro dependiese de ello en las próximas 24 horas, porque sí que depende de ello", ha enfatizado Obama en Jacksonville, en Florida, un territorio que será clave para el desenlace final, y que en los pasados comicios causó polémica en la victoria republicana. Allí ha vuelto a apelar a la "política de unidad", frente a la voluntad de los republicanos de "hacer una política de división".

En un mitin en Carolina del Norte, Obama ha instado a los votantes a acudir a votar para "cambiar Estados Unidos". "Tenemos un solo día", ha afirmado el candidato demócrata. "Mañana podemos optar por poner en marcha políticas que beneficien a la clase media, que ayuden no a Wall Street sino a la gente corriente. Mañana podemos conseguir el cambio que necesitamos".

En un homenaje a su abuela, fallecida este lunes en Honolulu de cáncer, el candidato -que en un momento dado ha dejado fluir libremente sus lágrimas, pero sin interrumpir su discurso-, ha aludido a los "héroes callados" de su país.

Tras Carolina del Norte, Obama ha cerrado su campaña de manera oficial esta madrugada en Manassas (Virginia), donde desde 1964 no se ha votado por un candidato demócrata, pero que esta vez parece inclinarse por el senador por Illinois. "Sólo tengo una palabra para vosotros: mañana", ha repetido, como en Florida, en su último mitin. "Tras ocho años de políticas fracasadas y 21 meses de campaña, estamos a menos de un día de traer el cambio", ha señalado Obama, que tiene previstos varios actos en Indiana antes de desplazarse a Chicago para recibir los resultados y acudir a la fiesta de la noche electoral de su campaña.

Jornada maratoniana para McCain

Por su parte, McCain, ha cerrado con el mismo mensaje en Arizona, su estado natal, tras un frenético viaje por siete Estados en apenas 24 horas. Junto a su mujer, Cindy, el senador republicano ha asegurado: "Ha sido un largo, largo, largo viaje hasta nuestra nominación pero todavía queda un día".

Como Obama, la precaución ha ganado protagonismo en esta última jornada de campaña republicana pero, a diferencia del senador por Illinois, McCain está por detrás en todas las encuestas. Sin embargo, el republicano se ha mostrado confiado: "Es estupendo estar en casa después de recorrer siete estados en un día y ver el entusiasmo que hemos recibido. Vamos a ganar mañana". McCain ha recorrido en el último día de campaña casi 6.000 kilómetros en un frenesí electoral que incluía muchos de los Estados clave, como Florida, en el sur, la Pensilvania industrial, en el norte, e Indianápolis, Nevada y Arizona, en el oeste.

Según la última encuesta de la cadena estadounidense CNN, el senador por Illinois lidera la intención de voto en Pensilvania, un Estado que en las últimas dos elecciones presidenciales mostró un fuerte apoyo por los demócratas Al Gore y John Kerry, pero ambos candidatos acabaron ganando en votos por muy poco margen. Pensilvania reparte 21 votos electorales y casi todas las encuestas se lo dan a Obama.

Desde este Estado, en un mitin en Township, el aspirante republicano John McCain ha sentenciado: "Sólo queda un día para que llevemos a América hacia una nueva dirección. Necesitamos ganar en Pensilvania y mañana, con vuestra ayuda, ganaremos". "Voluntarios, llamad a las puertas, llevad a vuestros vecinos a los centros de votación. Necesito vuestro voto", ha dicho. McCain y su número dos Sarah Palin han visitado Pensilvania diez veces en quince días.

Ventaja en las encuestas

Las encuestas, tanto a nivel nacional como en los principales estados clave, siguen siendo favorables a Obama. En los últimos días, la estrategia de McCain de presentar a su rival como un peligroso socialista partidario de redistribuir la riqueza, anatema para los republicanos, parece haber dado algo de aire a su campaña, aunque tal vez insuficiente y tal vez demasiado tarde, dado que un enorme porcentaje de votantes, cercano al 30%, han emitido ya su voto de forma anticipada en los 31 Estados que lo permiten. Según las encuestas, la ventaja de Obama entre los que ya han votado es de hasta 19 puntos.

Además, según la última encuesta de Reuters/Zogby, el candidato demócrata aventaja a su rival en seis de los ocho Estados considerados claves, incluyendo Florida y Ohio. Si Obama se apunta estos dos Estados, su elección estaría prácticamente asegurada. Según esta encuesta, Obama aventaja a McCain en Misuri (1 punto), en Florida (2 puntos) y en Pensilvania (11 puntos), así como en Ohio (seis puntos), Virginia (6 puntos) y Nevada (8 puntos), todos Estados ganados por Bush en 2004. A nivel nacional, el sondeo da siete puntos de ventaja a Obama, uno más que la semana pasada. Mientras, McCain ganaría a Obama por cinco puntos en Indiana y por uno en Carolina del Norte.