lunes, septiembre 29, 2008

LA SALIDA DE EMPRESAS EXTRANJERAS DEL PAÍS PUDO INFLUIR EN EL RESULTADO

SANTO DOMINGO.- República Dominicana tiene una baja puntuación en el ranking sobre naciones más atractivas para la inversión extranjera, lo cual contrasta con sus esfuerzos para mejorar el ambiente interno de negocios, tal como informó recientemente el Banco Mundial en su informe Doing Business.

Los resultdaos del informe sobre inversión en infraestructuras en el mundo elaborado por la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo (Unctad), y publicado el pasado miércoles 24, indican que el país es de los peores para invertir en una lista de 12 naciones más atractivas en América Latina y el Caribe.

República Dominicana aumentó en 2007 el monto de Inversión Extranjera Directa (IED) a US$1,698 millones y ya en el primer semestre de este año el Banco Central la ubica en US$1,511.6 millones. En tanto que en el informe “Haciendo Negocios 2009” quedó entre las 10 naciones más reformadoras.

Sin embargo, la Unctad en su último informe sobre inversiones en infraestructuras en el mundo señala a Argentina como una nación que perdió atractivo de parte de las empresas transnacionales (ETN) al bajar de los primeros lugares al puesto 9, quedando por encima sólo de Venezuela, Bolivia y República Dominicana, según reportes internacionales elaborados con datos del Foro Económico Mundial.

En el Informe se analizan las tendencias más recientes de la inversión extranjera directa (IED) y se examina el papel de las ETN en el desarrollo de las infraestructuras especialmente en electricidad, telecomunicaciones, transporte y agua. Indica que en la región de América Latina y el Caribe aumentó la entrada de inversión extranjera directa hasta alcanzar un máximo histórico de US$126,000 millones.

De éstos, los flujos de IED llegaron a US$34,000 millones en la región, al pesar de la desaceleración económica de Estados Unidos, lo cual atribuye en parte al dinamismo en minería, la industria del acero y la banca, cuyo principal objetivo no es el mercado estadounidense.

De acuerdo al informe de la Unctad, la presencia exclusiva de empresas de propiedad estatal limita las oportunidades de los inversores extranjeros. “Esta situación se acentuó en 2007 cuando una serie de países, como Bolivia, Ecuador y Venezuela cambiaron de política al aumentar impuestos y restringir o prohibir más las inversiones extranjeras en el petróleo y el gas”, indica el documento.

Agrega que la IED en República Dominicana ha propiciado la diversificación económica y que el marco regulatorio del país es abierto, liberal y poco restrictivo, por lo que se recomienda aprobar una nueva ley de inversiones que refleje el buen trato que en la práctica reciben los inversores extranjeros.

El panorama general del informe World Investment Prospects Survey 2008-2010 de la Unctad, explica que la gran afluencia de IED a la región de América Latina y el Caribe se debió principalmente a la demanda de recursos naturales. Precisa que la desaceleración de la economía mundial y las turbulencias financieras han ocasionado una crisis de liquidez en los mercado monetarios y de títulos de deuda en muchos países desarrollados.

Por esa causa el valor de las fusiones y adquisiciones transfronterizas (FAS) en los países desarrollados disminuyó considerablemente en el primer semestre del 2008, en comparación con el segundo semestre de 2007.
CONTRADICCIÓN
Cambio de estrategia.La adopción de medidas más restrictivas de política monetaria para dar respuesta a las variaciones de los precios de las importaciones de productos básicos, lejos de proporcionar el estímulo expansivo necesario para contrarrestar las tendencias a la recesión, podría agravarlas, afirma la Unctad en su informe de 2008.
Asimismo, define como “una paradoja” el hecho de que los países en desarrollo que se caracterizan por la escasez de capital, lo exporten a los países desarrollados, “ricos en capital”.Este enigma, que cuestiona las teorías económicas dominantes es aún más sorprendente cuando se considera que muchos países exportadores de capital han venido registrando tasas más altas de inversión y crecimiento que los países que siguen dependiendo de las importaciones netas de capital. El informe propone centrar las políticas financieras en la reinversión de los beneficios.