NUEVA YORK.- Darren Lynch, un narcotraficante de Long Island al que la policía del condado Suffolk arrestó en un allanamiento en el que encontró un pequeño arsenal de armas de fuego y chalecos anti balas, asesinó a balazos a dos hispanos - uno de ellos estudiante universitario - los descuartizó y con la ayuda de su novia, enterró pedazos en el patio de la casa de su madre y otros los tiró en una basurero.
La cadena NBC dijo que las víctimas se reportaron como "desaparecidas" desde el 16 de julio, pero el acusado admitió haber asesinado a Jairo Santos y Joseph Odierno de 22 y 25 años de edad respectivamente el 16 de julio.
El asesino y narcotraficante contó con la ayuda de su novia para matar a los hispanos, desmembrar sus cuerpos y enterrarlos. Odierno residía en Long Island y Santos en el poblado de Old Brookville. El segundo era estudiante del colegio CW Post de la Universidad de Long Island.
Durante la incursión policial a la residencia de Darren, los oficiales decomisaron varias pistolas, rifles, un fusil AK-47, un chaleco anti balas y una gran cantidad de marihuana, cocaína y heroína, dijo la policía de Suffolk.
Los detectives hicieron la pesquisa amparándose en una orden de allanamiento expedida por un juez de la corte de Suffolk. La novia de Darren también fue arrestada y acusada. Fue identificada como Leah Reynolds de 22 años de edad. En el interrogatorio, el acusado admitió haber disparado a las cabezas de sus víctimas y luego descuartizar sus cuerpos.
Los infortunados jóvenes salieron juntos el día en que Darren los ejecutó.
Los asesinatos fueron perpetrados la madrugada del 17 de julio. Dijo el victimario que parte de los cuerpos los tiró en un basurero de Northridge Drive en el poblado de Coram y otras las sepultó en el patio de la casa de su madre en Summercress Lane.
Los detectives dijeron que recuperaron los restos de las víctimas en ambos lugares. La novia de Darren encubrió los crímenes escondiendo a su compañero sentimental en su residencia. Lynch está acusado de dos cargos por asesinato en segundo grado y fue presentado esta mañana en una corte del distrito de Central Islip. Su novia está acusada de conspiración, complicidad obstrucción de la justicia.
La investigación prosigue, informaron las autoridades del condado Suffolk.
La cadena NBC dijo que las víctimas se reportaron como "desaparecidas" desde el 16 de julio, pero el acusado admitió haber asesinado a Jairo Santos y Joseph Odierno de 22 y 25 años de edad respectivamente el 16 de julio.
El asesino y narcotraficante contó con la ayuda de su novia para matar a los hispanos, desmembrar sus cuerpos y enterrarlos. Odierno residía en Long Island y Santos en el poblado de Old Brookville. El segundo era estudiante del colegio CW Post de la Universidad de Long Island.
Durante la incursión policial a la residencia de Darren, los oficiales decomisaron varias pistolas, rifles, un fusil AK-47, un chaleco anti balas y una gran cantidad de marihuana, cocaína y heroína, dijo la policía de Suffolk.
Los detectives hicieron la pesquisa amparándose en una orden de allanamiento expedida por un juez de la corte de Suffolk. La novia de Darren también fue arrestada y acusada. Fue identificada como Leah Reynolds de 22 años de edad. En el interrogatorio, el acusado admitió haber disparado a las cabezas de sus víctimas y luego descuartizar sus cuerpos.
Los infortunados jóvenes salieron juntos el día en que Darren los ejecutó.
Los asesinatos fueron perpetrados la madrugada del 17 de julio. Dijo el victimario que parte de los cuerpos los tiró en un basurero de Northridge Drive en el poblado de Coram y otras las sepultó en el patio de la casa de su madre en Summercress Lane.
Los detectives dijeron que recuperaron los restos de las víctimas en ambos lugares. La novia de Darren encubrió los crímenes escondiendo a su compañero sentimental en su residencia. Lynch está acusado de dos cargos por asesinato en segundo grado y fue presentado esta mañana en una corte del distrito de Central Islip. Su novia está acusada de conspiración, complicidad obstrucción de la justicia.
La investigación prosigue, informaron las autoridades del condado Suffolk.