viernes, julio 18, 2008

Arrestan oficiales policiales alertaban banda de narcos

Santo Domingo.- Agencia antidrogas de la Florida y autoridades locales y federales, arrestan 19 miembros de organización criminal, dedicadas al contrabando y distribución de cocaína. Entre ellos, dos oficiales policiales ofrecían al grupo protección.

Los miembros de esta banda imputada por narcotráfico distribuían kilos de cocaína en Liberty City.

Los oficiales policiales norteamericanos, Michael Anthony King de 42 años y Antonio L.Roberts de 46, abusaban de su autoridad como policías para asistir a los imputados Marvin Lorenzo Coney, alias "Cone Head" o cabeza de cono, de 42 años juntos a los miembros de la organización criminal.

Los demás imputados son;
Michael Renardo Johnson, alias Jay. De 45 y de Miami.
Christopher Nicholson, de 37 años y de Miami.
Corey Reed-Rogers, de 32 años y de Pembroke Pines.
Carnell Demon Sumner, de 38 años, de Pembroke Pines.
Michael Tyrone West, de 52 años. De Miami.
Japtalian Evans, alias Nephew (El sobrino), de 29 y de Fort Pierce.
Edwin Alexander, alias Cook (El cocinero), de 37 y de Miami.
Glenn Roberts, 45, de Miami.
Ernest Pernell Shaw, alias Toochie, 31, de Miami.
Michael McKnight, alias Mike Sykes, 47, de Miami.
Antwain Andre Mcduffie, 25, de Miami.
Antionett Lasonia Carte, 32, de Miami.
Antwun Ivory Wilson, 35, de Miami.
Boris Lee Trapp, 52, de Miami.
Kimberly Paschal, 32, de Miami Gardens y
Anette Smith, alias Malibu, 51, de Miami.

El Procurador Alexander Acosta declaró que los dos oficiales alertaban a los principales de la banda de posibles actividades policiales en contra del narcotráfico en el área.

Acosta dijo que la actuación de los oficiales fue deshonrosa, cometieron traición en contra de la institución policial, pusieron en riesgo la vida de sus otros compañeros, oficiales policiales. Ser policía no es una tarea fácil, de por sí es peligroso, como más lo es el tener informantes de narcos en las filas policiales.

El resultado de los 19 arrestos, fue parte de operativo encubierto durante dos años, entre oficiales federales y estatales. Usaron informantes confidenciales, cámaras de espionaje, grabaron conversaciones y confiscaron drogas, dinero y armas semiautomáticas.

En las grabaciones, los oficiales King y Roberts, alertaban a Coney, de operativos antidrogas, para que se cuidara y tomara medidas, para no ser arrestado. Esta evidencia será usada en corte contra los miembros de la banda.